Si sufres de D.E. no estás solo: alrededor de 1 de cada 4 hombres mayores de 65 años experimentan algún grado de disfunción eréctil.
Los hombres jóvenes también luchan a menudo con la D.E. Hay diferentes tratamientos disponibles que incluyen; la terapia oral, las inyecciones y los dispositivos de vacío.
Una opción alternativa con alta eficacia y satisfacción es la prótesis de pene. Es necesario una cirugía, por lo que su médico le puede recomendar primero opciones menos invasivas.
Hay mucho que aprender y opciones que considerar, así que empecemos.
El pene tiene dos cavidades en su interior que se llaman Cuerpos Cavernosos, los cuales se extienden desde el glande (la cabeza del pene) hasta el interior de la pelvis.
El interior de estas cavidades está formado por un tejido esponjoso que tiene la capacidad de aumentar de volumen sanguíneo y crecer en tamaño. Cuando no hay actividad sexual, las arterias que suministran sangre al pene están solo parcialmente abiertas, permitiendo que entre flujo sanguíneo suficiente para mantener el tejido sano (Fig. 1).
Cuando se produce la estimulación sexual, el cerebro manda una señal que acciona una respuesta hormonal que permite a estas arterias abrirse completamente. Las arterias abiertas permiten que la sangre entre más rápidamente a los cuerpos cavernosos que la sangre que puede salir a través de las venas. Como los cuerpos cavernosos se llenan y aumentan de tamaño, las venas se comprimen, atrapando la sangre en el pene y causando la rigidez.
Este proceso de reacción en cadena ocurre hasta que se logra y se mantiene la erección. (Fig 2 y 3). Cuando el cerebro deja de enviar señales, las hormonas disminuyen y las arterias vuelven a su estado normal. Obteniéndose entonces el estado de flacidez. Los problemas de D.E. empiezan si las señales sanguíneo es inadecuado, o cuando el tejido eréctil está dañado.
La Disfunción Eréctil (D.E.) es la incapacidad constante de mantener o conseguir una erección para mantener una relación sexual.
La D.E. puede tener una causa física. De hecho, en más del 80% de los casos la D.E. puede ser señal de un problema o desorden físico existente. En la mayoría de los hombres, la causa de D.E. puede ser fácilmente identificada. Y luego, se puede recomendar un tratamiento adecuado para volver a tener una vida sexual satisfactoria.
• Una lesión (ej. cerebral o médula espinal).
• Una enfermedad (ej. diabetes, presión sanguínea alta o colesterol alto).
• Una operación (ej. retirada de la próstata).
• Uso de sustancias (ej. tabaco, drogas, alcohol o medicamentos).
Existen varios métodos para el tratamiento de la D.E. Con su médico podrá discutir todas estas opciones con más detalle. Todas la decisiones respecto a las opciones de tratamiento de la D.E. deben ser tomadas entre usted y su médico, considerando sus necesidades personales y las ventajas o desventajas de cada tratamiento.
• Cambios en el estilo de vida como: dejar de fumar, perder peso o comer saludablemente.
• Medicamentos orales (inhibidores PDE5).
• Inyección de medicación directamente en el pene.
• Supositorios intrauretrales.
• Dispositivos de vacío.
Para algunos hombres, las opciones de tratamiento numeradas arriba, no se adaptan a sus necesidades debido a sus condiciones médicas, estilo de vida, preferencias personales o el tratamiento puede ser inefectivo. En estos casos, un implante de pene puede ser una opción apropiada.
Otros datos sobre las prótesis de pene
Una prótesis de pene es un dispositivo que se coloca en el cuerpo del hombre y está diseñada para ayudarle a obtener una erección. Este dispositivo se prescribe por un médico a los hombres que sufren D.E. Después del procedimiento quirúrgico, se necesitan entre cuatro o seis semanas antes de que el implante pueda ser utilizado. Su médico le proporcionará información más detallada sobre la recuperación, así como de los riesgos y beneficios de la prótesis.
Las revistas científicas han publicado ratios de satisfacción del paciente del 98% de las prótesis de pene.
Estudios recientes muestran que tienen un ratio de fiabilidad mecánica del 97,5% a los 5 años del primer implante.
Una vez implantada, la prótesis de pene no es perceptible a la vista. La apariencia del pene en estado flácido es relajada y normal, y a simple vista no es obvio que se tiene un implante.
Las prótesis de pene requieren una cirugía. Los riesgos quirúrgicos pueden incluir, pero no están limitados a, complicaciones como infección, hinchazón escrotal, dolor y malestar. Una vez implantado el sistema, se puede dar caso de infección o mal funcionamiento del dispositivo, lo que requiere una cirugía adicional.
Cuando un hombre sufre de D.E., la pareja tiende a culparse a si misma. Piensa que es su culpa, que quizás su pareja no se sienta atraído hacia ella. A menudo no se da cuenta de que la D.E. de su pareja es causada por una razón médica.
Mucha gente ve la D.E. como un problema sexual, cuando de hecho, es un problema físico. Condiciones como la diabetes, el colesterol alto o enfermedades de corazón en fases tempranas, pueden contribuir a que aparezca la D.E. Cuanto más rápido se de cuenta de que es un problema médico lo que afecta a su pareja, más rápido podrá comenzar la curación.
Los hombres con D.E. a menudo experimentan fuertes sentimientos de vergüenza, soledad, ansiedad y depresión. A menudo dicen que la incapacidad de tener una erección les hace sentirse menos hombres. De hecho, pueden dudar si besar o abrazar a su pareja porque se sienten avergonzados de cómo puede concluir. Confrontándolo con sentimientos de dolor o ira puede que se sienta atacado y que se retire aún más.
Tenga una conversación con su pareja (pero no en el dormitorio). Ponga espacio y tiempo entre la conversación y su último encuentro sexual. Haga que su pareja esté al tanto de las condiciones de salud que pueden causar la D.E. y sugiérale suavemente que vaya al médico. Algunos hombres pueden pedir a su pareja que les acompañe a la cita, mientras que otros pueden preferir tener una conversación privada con su médico. Permita que él decida.
Algunas parejas piensan que están ayudando a sus parejas diciendo que la D.E. no es un gran problema. A él le importa profundamente, y sugiriendo lo contrario, se manda el mensaje de que no se echa de menos la intimidad y el contacto sexual con él, lo que puede ser doloroso.
R. Usted será capaz de tener un orgasmo con una prótesis de pene si era capaz antes de la intervención. Consulte con su médico acerca del resultado esperado.
R. Cada caso es diferente y por tanto la recuperación será diferente también. Normalmente la recuperación habitual es entre 4 y 6 semanas. Su médico le determinará que puede hacer o no hacer durante ese tiempo. Es importante seguir las recomendaciones del médico para asegurarse un mejor resultado.
R. Cada implante de pene se adapta a la anatomía del paciente. Dependiendo de su historial médico, puede que no sea inusual la pérdida de 1-2 cm. Discuta este importante detalle con su médico.
P. ¿Notará alguien que llevo un implante?
R. Las prótesis de pene son colocadas completamente dentro del cuerpo, por lo que nadie verá el implante. De hecho, sólo lo sabrán si usted se lo dice.
R. No. Si todavía es capaz de tener erecciones por si mismo, las cuales son satisfactorias para una relación sexual, debería considerar cuidadosamente si una prótesis se adecúa correctamente a su situación. Sin embargo, si no puede tener erecciones o si éstas no son satisfactorias para la relación sexual, entonces una prótesis puede proporcionarle una erección más “instantánea” que las pastillas o el dispositivo de vacío.
R. Ambas prótesis le proporcionan la capacidad de tener una erección satisfactoria para una relación sexual. La principal diferencia es que la prótesis que se colocan en los cuerpos cavernosos. No hay más partes en la prótesis. Para tener una erección, solo se necesita levantar el pene a la posición deseada. Cuando la relación haya terminado se vuelve a colocar el pene en su posición previa. Con Titan Touch, se bombeando hasta que esté satisfecho con la erección. Cuando la relación haya terminado, se presiona el los cilindros retorne al reservorio, devolviendo el pene con su médico para estar seguro de cuál es el mejor implante para usted.